Tras un año y medio de encuentros puramente virtuales, y ya más cerca de ese día después que todos y todas esperábamos, los pasados 5, 6 y 7 de julio organizamos el primer encuentro híbrido desde la creación de la plataforma en marzo de 2020: Diálogos para el Día Después.
De la mano de la Universidad Politécnica de Madrid y el Centro Internacional Antonio Machado, creamos este espacio de encuentro convencidos de que la transformación real y profunda que necesitamos hacia la sostenibilidad solo se puede lograr a través del diálogo verdadero y valiente, la confianza mutua y la colaboración profunda entre personas e instituciones diferentes.
Así presentamos los Diálogos para el Día Después.
Tras una breve introducción por parte del presidente de la Fundación Duques de Soria Francisco Benjumea, en la sesión de apertura Mónica Oviedo, responsable de sostenibilidad de Iberdrola y una de las impulsoras de nuestra plataforma, destacó la confianza mutua como el valor clave en la construcción colaborativa de la plataforma El Día Después, desde mucho antes de su creación oficial en marzo de 2020, hasta haber sido recientemente seleccionada por la ONU como buena práctica ODS.
Un valor que ha imperado en estos 17 meses de trabajo: confianza. Tenemos un objetivo común y hemos dejado de lado los prejuicios
Mónica Oviedo, responsable de Sostenibilidad de Iberdrola e impulsora de El Día Después
Diálogo para transformar realidades: la importancia del contexto
Carlos Mataix, director del itdUPM y uno de los impulsores de El Día Después, destacó el valor trascendental del diálogo no solo en El Día Después, sino en la reconstrucción y transformación sostenible post Covid a la que nos invitan los fondos europeos Next Generation.
“La pandemia nos ha ofrecido una radiografía de nosotros mismos, como individuos y como sociedad”, poniendo en evidencia algunas fortalezas, pero también debilidades, de forma que “seríamos muy torpes, si de todo ello no estuviéramos aprendiendo para anticiparnos y prepararnos para mitigar o evitar otras crisis”.
El diálogo plural, cordial y continuo es el punto de partida para la acción transformadora, pero ese tipo de diálogo es escaso.
Carlos Mataix, director del itdUPM
Sin embargo, apuntó, “es prácticamente imposible cambiar y aprender si no nos escuchamos, de ahí la insistencia en el diálogo”. Pero “la calidad del diálogo, así como sus resultados, dependen mucho del contexto en el que se produce el diálogo mismo”. Y ese contexto es el que nos hemos esforzado por diseñar en El Día Después, llegando a identificar tres condiciones fundamentales para diálogos que produzcan transformaciones: la pluralidad de puntos de vista, conocimientos, de posiciones ideológicas; la cordialidad del diálogo, lejos de la confrontación; y la continuidad como clave para que el diálogo nos lleve a lugares nuevos, y para enriquecer cada punto de vista.
En definitiva, un diálogo así es la base no solo para el conocimiento -para saber mejor lo que nos pasa-, sino también para la acción, para cambiar realidades, y ese es el tipo de diálogos que se están produciendo en el espacio como El Día Después.
Diálogo y colaboración en la política contemporánea
Insistiendo sobre esta idea, también el alcalde de Soria, Carlos Martínez, destacó en su intervención la importancia de hacer política desde la cooperación y no desde la confrontación, y remarcó que “es en los momentos más difíciles de la historia de la humanidad cuando se han producido los mayores avances” por lo que “no podemos dejar pasar esta oportunidad”.
Tras invitar a reflexionar sobre cómo transformar los sistemas alimentario, energético, tecnológico, educativo, sanitario, migratorio y territorial, el alcalde defendió que “la recuperación solo puede ser viable si es justa y atiende a la igualdad de oportunidades de las personas y de los territorios”.
De la misma idea se mostró el vicepresidente de la Junta de Castilla y León Francisco Igea, quien, desde una posición ideológica distinta a la de Carlos Martínez, remarcó también la necesidad de cambiar un sistema político esencialmente frentista por una mayor capacidad de dialogar, y reivindicó la necesidad de que los territorios se sientan partícipes de las grandes conversaciones y decisiones políticas y mostró su reconocimiento al valor del alcalde, Carlos Martínez.
Las alianzas globales deben sustituir la vocación de competición por una vocación de cooperación.
Carlos Martínez, alcalde de Soria
La política en este país tiene que cambiar: tenemos que ser capaces de salir de este modelo político básicamente frentista y ser capaces de dialogar.
Franscisco Igea, vicepresidente de la Junta de Castilla y León